INTRODUCCIÓN
La
lógica nace en el seno de la filosofía pero tal como ocurrió con otras
disciplinas su ámbito de estudio y de conocimiento dejó de ser parte exclusiva
de la filosofía, para integrarse al campo general de la ciencia. Sin embargo,
hoy por hoy el discurso argumentativo es el vehículo de expresión básico en el
quehacer filosófico, por lo tanto se puede decir que la lógica es una de las
pocas herramientas de análisis y crítica de que dispone el filósofo. Varias
discusiones filosóficas presuponen el uso de principios lógicos básicos y el
uso del análisis lógico puede ayudar a esclarecer los planteamientos de varios
problemas filosóficos, de ahí la importancia de estudiar lógica en el campo de
la filosofía.
La lógica pretende pues, proporcionar los conocimientos teóricos primordiales en el campo de la lógica, que le permitan el desarrollo de habilidades y actitudes básicas para el aprecio y buen uso de la lógica en el terreno filosófico, también habla acerca del conocimiento y la forma de los pensamientos; expresa que la materia es el contenido, el objeto acerca del cual se piensa. La forma, en cambio, es el modo por el cual el pensamiento se convierte en propiedad de nuestro intelecto. Por esta razón, algunos filósofos han definido la lógica como " la ciencia que estudia los principios formales del conocimiento, es decir, aquellas condiciones que deben cumplirse para que un conocimiento, cualquiera que sea su contenido, pueda considerarse como verdadero y bien fundado, y no como una mera ocurrencia o como una hipótesis sin base ninguna".
La lógica pretende pues, proporcionar los conocimientos teóricos primordiales en el campo de la lógica, que le permitan el desarrollo de habilidades y actitudes básicas para el aprecio y buen uso de la lógica en el terreno filosófico, también habla acerca del conocimiento y la forma de los pensamientos; expresa que la materia es el contenido, el objeto acerca del cual se piensa. La forma, en cambio, es el modo por el cual el pensamiento se convierte en propiedad de nuestro intelecto. Por esta razón, algunos filósofos han definido la lógica como " la ciencia que estudia los principios formales del conocimiento, es decir, aquellas condiciones que deben cumplirse para que un conocimiento, cualquiera que sea su contenido, pueda considerarse como verdadero y bien fundado, y no como una mera ocurrencia o como una hipótesis sin base ninguna".
Teniendo en cuenta que el pensar es un proceso que
ocurre en el tiempo dentro de un sujeto pensante y que el
pensamiento, como tal, puede existir formulado y que en este caso es
intemporal, puesto que no esta en el tiempo, podemos hallar una diferencia
fundamental entre la psicología y la lógica; "a la primera, corresponde el
estudio del sujeto pensante y de los procesos psicológicos reales que ocurren en él,
entre los cuales esta también el proceso de pensar. En cambio, la lógica no
debe ocuparse de los procesos psíquicos del pensar, sino del pensamiento
elaborado y formulado.
Debe estudiar los pensamientos mismos analizarlos en
sus formas, en su estructura,
en sus enlaces y demás caracteres que pueden tener, prescindiendo en absoluto
del sujeto que pudo haberlos elaborado. Desarrollar
conocimientos sobre la abstracción del conocimiento lógico y sus alternativas
de desarrollo para el pensamiento, por medio de un proceso de elaboración de
campos de diferenciación y análisis, lo que permite resolver problemáticas de
diversos tipos de acuerdo a planteamientos lógicos específicos lo que le ayuda
a reconocer la diversidad de pensamientos.
A
través de nuestro trabajo conoceremos mucho más de este tema que es demasiado
extenso pero que tratamos de resumir, y tomar los detalles más interesantes.
DESARROLLO
LA LÓGICA
LA LÓGICA COMO PROCESO RAZONABLE
La lógica es una ciencia
formal que estudia los principios de la demostración e inferencia válida.
La palabra se deriva del griego que
significa «dotado de razón, intelectual, dialéctico, argumentativo», que a su
vez viene de λόγος (logos), «palabra, pensamiento, idea, argumento, razón o principio».
Así como el objeto de estudio tradicional de la química es
la materia,
y el de la biología la vida, el de la lógica es
la inferencia.
La inferencia es el proceso por el cual se derivan conclusiones a partir de
premisas. La lógica investiga los principios por los cuales algunas
inferencias son aceptables, y otras no. Cuando una inferencia es aceptable, lo
es por su estructura lógica, y no por el contenido
específico del argumento o el lenguaje utilizado. Por esta razón la lógica se
considera una ciencia formal, como la matemática, en vez de
una ciencia empírica.
La lógica tradicionalmente se consideró una rama de la filosofía.
Pero desde finales del siglo XIX, su formalización simbólica ha demostrado una
íntima relación con las matemáticas,
y dio lugar a la lógica matemática. En el siglo XX la lógica ha
pasado a ser principalmente la lógica simbólica, un cálculo definido
por símbolos y reglas de inferencia, lo que ha permitido
su aplicación a la informática. Hasta el siglo XIX, la lógica aristotélica y estoica mantuvo
siempre una relación con los argumentos formulados en lenguaje
natural. Por eso aunque eran formales, no eran formalistas.
Hoy esa relación se trata bajo un punto de vista completamente diferente. La
formalización estricta ha mostrado las limitaciones de la lógica tradicional o
aristotélica, que hoy se interpreta como una parte pequeña de la lógica de clases.
HISTORIA
Históricamente la palabra «lógica» ha
ido cambiando de sentido. Comenzó siendo una modelización de los razonamientos,
propuesta por los filósofos griegos, y posteriormente ha
evolucionado hacia diversos sistemas
formales. En un principio la lógica no tuvo el sentido de estructura
formal estricta.
Edad Antigua
La lógica, como un análisis explícito
de los métodos de razonamiento, se desarrolló originalmente en tres
civilizaciones de la historia
antigua: China, India y Grecia, entre
el siglo V y el siglo I a. C. En China no duró mucho
tiempo: la traducción y la investigación escolar en lógica fue reprimida por la dinastía Qin,
acorde con la filosofía legista.
En India, la lógica duró bastante más: se desarrolló (por ejemplo con la nyāya)
hasta que en el mundo islámico apareció la escuela de Asharite, la cual suprimió parte del
trabajo original en lógica. A pesar de lo anterior, hubo innovaciones
escolásticas indias hasta principios del siglo XIX, pero no sobrevivió mucho
dentro de la India colonial. El tratamiento sofisticado y formal de la lógica
moderna aparentemente proviene de la tradición griega.
Se considera a Aristóteles el fundador de la lógica como propedéutica o herramienta básica para todas las
ciencias. Aristóteles fue el primero en formalizar los razonamientos, utilizando letras
para representar términos. También fue el primero en emplear el término
«lógica» para referirse al estudio de los argumentos dentro del «lenguaje apofántico» como
manifestador de la verdad en la ciencia. Sostuvo que la verdad se manifiesta en el juicio verdadero y el argumento válido en el silogismo:
«Silogismo es un argumento en el cual, establecidas ciertas cosas, resulta
necesariamente de ellas, por ser lo que son, otra cosa diferente». Se refirió en varios escritos de su Órganon a cuestiones tales como concepto,
la proposición, definición, prueba y falacia.
En su principal obra lógica, los Primeros analíticos, desarrolló el silogismo,
un sistema lógico de estructura rígida. Aristóteles también formalizó el cuadro de oposición de los juicios y categorizó las formas válidas del
silogismo. Además, Aristóteles reconoció y estudió los argumentos inductivos,
base de lo que constituye la ciencia experimental, cuya lógica está
estrechamente ligada al método científico. La influencia de los logros
de Aristóteles fue tan grande, que en el siglo XVIII, Immanuel Kant llegó a decir que Aristóteles había
prácticamente completado la ciencia de la lógica.
Los filósofos estoicos introdujeron el silogismo hipotético y anunciaron la lógica proposicional, pero no tuvo mucho
desarrollo.
Por otro lado, la lógica
informal fue cultivada
por la retórica,
la oratoria y la filosofía,
entre otras ramas del conocimiento. Estos estudios se centraron principalmente
en la identificación de falacias
y paradojas,
así como en la construcción correcta de los discursos.
En el periodo romano la lógica tuvo
poco desarrollo, más bien se hicieron sumarios y comentarios a las obras
recibidas, siendo los más notables: Cicerón, Porfirio y Boecio. En el
período bizantino, Filopón.
Edad Media
Con el nombre de Dialéctica en la Edad Media la Lógica mantiene la condición de
ciencia propedéutica.
Así se estudia en la estructura de las enseñanzas del Trivium como una de las artes
liberales pero sin
especiales aportaciones en la Alta Edad Media. En su evolución hacia la Baja Edad
Media son importantes
las aportaciones árabes de Al-Farabí; Avicena y Averroes,
pues fueron los árabes quienes reintrodujeron los escritos de Aristóteles en
Europa.
La evolución crítica que se va
desarrollando a partir de las aportaciones de Abelardo dinamizaron la problemática lógica y
epistemológica a partir del siglo XIII (Pedro Hispano; Raimundo
Lulio Lambert de Auxerre Guillermo de Sherwood) que
culminaron en toda la problemática del siglo XIV: Guillermo de Ockham; Jean Buridan; Alberto de Sajonia.
Aquí están tratados una cantidad de
nuevos problemas en la frontera de la lógica y la semántica que no fueron tratados por los
pensadores antiguos. De especial relevancia es la problemática respecto a la
valoración de los términos del lenguaje en relación con los conceptos universales, así como el
estatuto epistemológico y ontológico de éstos y el problema de la individuación.
Edad Moderna
Un nuevo enfoque adquiere esta lógica
en las interpretaciones racionalistas de Port Royal, en el siglo XVII, (Antoine
Arnauld; Pierre Nicole) pero
tampoco supusieron un cambio radical en el concepto de la Lógica como ciencia.
Los filósofos racionalistas, sin
embargo, aportaron a través del desarrollo del análisis y
su desarrollo en las matemáticas (Descartes, Pascal y Leibniz)
los temas que van a marcar el desarrollo posterior. Son de especial importancia
la idea de Descartes de una Mathesis universalis y de Leibniz en la búsqueda de un lenguaje universal,
especificado con precisión matemática sobre la base de que la sintaxis de las palabras debería estar en correspondencia con las entidades designadas como individuos o elementos metafísicos,
lo que haría posible un cálculo o computación mediante algoritmo en el descubrimiento de la verdad.
Aparecen los primeros intentos y
realizaciones de máquinas de cálculo, (Pascal, Leibniz)
y, aunque su desarrollo no fue eficaz, sin embargo la idea de una Mathesis Universal o «Característica Universal», es el
antecedente inmediato del desarrollo de la lógica a partir del siglo XX. Kant consideraba que la lógica por ser una
ciencia a priori había encontrado su pleno desarrollo
prácticamente con la lógica aristotélica, por lo que apenas había sido
modificada desde entonces. Pero hace un uso nuevo de la palabra
«lógica» como lógica
trascendental, en el sentido de investigar los conceptos puros del entendimiento o categorías trascendentales.
Hegel considera la lógica dentro del Absoluto como
un proceso dialéctico del Espíritu Absoluto que produce sus determinaciones como concepto y su realidad como resultado en el devenir de la Idea del Absoluto como Sujeto, cuya verdad se manifiesta en el resultado del movimiento mediante la contradicción en tres momentos sucesivos, tesis-antítesis-síntesis. La epistemología y la ontología van unidas y expuestas en la Filosofía entendida ésta como Sistema Absoluto.
Siglo XIX
A partir de la segunda mitad del
siglo XIX, la lógica sería revolucionada profundamente. En 1847, George Boole publicó un breve tratado titulado El análisis matemático de la lógica,
y en 1854 otro más importante titulado Las leyes del pensamiento. La idea de
Boole fue construir a la lógica como un cálculo en el que los valores de
verdad se representan
mediante el 0 (falsedad) y el 1 (verdad), y a los que se les aplican operaciones matemáticas como la suma y la multiplicación.
Al mismo tiempo, Augustus De Morgan publica en 1847 su obra Lógica
formal, donde introduce las leyes de De Morgan e intenta generalizar la noción de
silogismo. Otro importante contribuyente inglés fue John Venn,
quien en 1881 publicó su libro Lógica
Simbólica, donde introdujo los famosos diagramas de
Venn. Charles Sanders Peirce y Ernst
Schröder, también
hicieron importantes contribuciones.
Sin embargo, la verdadera revolución
de la lógica vino de la mano de Gottlob Frege,
quien frecuentemente es considerado como el lógico más importante de la
historia, junto con Aristóteles. En su trabajo de 1879, la Conceptografía,
Frege ofrece por primera vez un sistema completo de lógica de predicados. También desarrolla
la idea de un lenguaje
formal y define la
noción de prueba. Estas ideas constituyeron una base
teórica fundamental para el desarrollo de las computadoras y las ciencias de la computación, entre otras
cosas. Pese a esto, los contemporáneos de Frege pasaron por alto sus
contribuciones, probablemente a causa de la complicada notación que desarrolló
el autor. En 1893 y 1903, Frege publica en dos volúmenes Las
leyes de la aritmética, donde intenta deducir toda la matemática a partir de la lógica, en lo que se
conoce como el proyecto
logicista. Su sistema, sin embargo, contenía una contradicción (la paradoja de Russell).
Siglo XX
El siglo XX sería uno de enormes
desarrollos en lógica. A partir del siglo XX, la lógica pasó a estudiarse por
su interés intrínseco, y no sólo por sus virtudes como propedéutica, por lo que
estudió a niveles mucho más abstractos.
En 1910, Bertrand
Russell y Alfred North Whitehead publican Principia mathematica, un trabajo
monumental en el que logran gran parte de la matemática a partir de la lógica,
evitando caer en las paradojas en las que cayó Frege. Los autores reconocen el
mérito de Frege en el prefacio. Principia mathematica utiliza una notación
inspirada en la de Giuseppe
Peano, parte de la cual todavía es muy utilizada hoy en día.
Si bien a la luz de los sistemas
contemporáneos la lógica aristotélica puede parecer equivocada e incompleta, Jan
Łukasiewicz mostró
que, a pesar de sus grandes dificultades, la lógica aristotélica era
consistente, si bien había que interpretarse como lógica de clases, lo cual no es pequeña
modificación. Por ello la silogística prácticamente no tiene uso actualmente.
Además de la lógica proposicional y la
lógica de predicados, el siglo XX vio el desarrollo de muchos otros sistemas
lógicos; entre los que destacan las muchas lógicas
modales.
La lógica y sus principios supremos
Por lo que hemos visto, podríamos decir que la
lógica es la disciplina filosófica que tiene un carácter formal, ya que estudia
la estructura o formas de pensamiento (tales como conceptos, proposiciones,
razonamientos) con el objeto de establecer razonamientos o argumentos válidos o
correctamente lógicos.
Además de estudiar las estructuras que conforman el
pensamiento, a la lógica le interesa descubrir las leyes y los
principios que permiten conducirnos con rigor, precisión y verdad hacia el
conocimiento.
Una definición que nos puede ayudar a resumir los
principales objetivos de la lógica es la que nos proporciona Gregorio
Fingermann; para este autor la lógica es: "La ciencia de las leyes y de
las formas del pensamiento, que nos da normas para la investigación científica
y nos suministra un criterio de verdad".
En las siguientes páginas, nos dedicamos a la tarea
de investigar cuáles son estas leyes o principios que norman nuestro
pensamiento, en qué consisten estas formas o estructuras del pensamiento mismo,
así como la naturaleza de estos criterios que nos orientan hacia la verdad; un
tipo de verdad formal que es la que le interesa estudiar a la
lógica.
Ahora bien, esta definición, como otras muchas que
encontramos en los textos, nos hace pensar que la lógica solamente incide en un
pensamiento o en un conocimiento especializado, como el científico o el
filosófico; sin embargo, esto no es así, pues además de que la lógica es un
"instrumento" para la ciencia, lo es también para nuestra vida
diaria, pues el ejercicio de razonar y de reflexionar no se reduce al ámbito
científico, ya que es algo que a menudo llevamos a cabo a lo largo de pláticas,
discusiones y decisiones que la vida misma nos plantea. Por ello, en la
actualidad se habla, incluso, de una lógica informal que, a
juicio del filósofo mexicano Alejandro Herrera, se propone examinar la
estructura de los razonamientos sobre cuestiones de la vida diaria y tiene una
doble vertiente analítica y evaluativa. Intenta superar el aspecto mecánico del
estudio de la lógica, así como entender y evaluar los argumentos con sus
ámbitos naturales, por ejemplo, el jurídico, el estético y el ético.
Es preciso observar que la que te hemos
proporcionado no es la única definición de lógica. De hecho, la historia de la
lógica registra una serie de opiniones sobre lo que es en sí esta ciencia y sus
temas y problemáticas. A manera de ejemplo, recordemos las siguientes:
v "La
lógica es la ciencia de la demostración, pues sólo se preocupa de formular
reglas para alcanzar verdades a través de la demostración" (Aristóteles).
v "La
lógica o arte de razonar es la parte de la ciencia que enseña el método para
alcanzar la verdad" (San Agustín).
v "La
lógica es la ciencia de las leyes necesarias del entendimiento y de la razón"(Kant).
v "La
lógica es la ciencia de la idea pura de la idea en el elemento abstracto del
pensamiento" (Hegel).
v "La
lógica es la ciencia de las aspiraciones intelectuales que sirven para
estimación de la prueba" (J. S. Mill).
Según las diferentes maneras de concebir o entender
la lógica, ésta se ha venido caracterizando como:
- Una
disciplina teórica. En cuanto que es considerada
como una ciencia o un conocimiento "que investiga, desarrolla y
establece los principios fundamentales proveyendo los métodos necesarios
para distinguir el razonamiento correcto del incorrecto. A través de todos
estos procesos, la lógica pretende encontrar la verdad".
- Una
disciplina práctica o normativa. En
la medida en que entraña una técnica, un arte o una destreza que nos
permite interpretar el razonamiento correcto y a la vez criticar el
razonamiento incorrecto, de la manera como lo hizo Aristóteles en sus
refutaciones sofísticas.
Así, muchas veces se dice que la utilidad de la
lógica estriba en que nos enseña a pensar correctamente y que, por
ello, más que una ciencia es un verdadero arte o entrenamiento de nuestras facultades
cognoscitivas. Muchas veces se dice que la lógica es una "gimnasia"
mental que nos entrena a usar correctamente nuestro intelecto.
Ciencia argumentativa y propedéutica
El término «lógica», se encuentra en
los antiguos peripatéticos y estoicos como una teoría de la argumentación o
argumento cerrado. De este modo
la forma argumentativa responde al principio de conocimiento que supone que representa
adecuadamente la realidad. Por
ello, sin perder su condición de formalidad, no son formalistas y no acaban de
desprenderse de las estructuras propias del lenguaje.
Con el nombre de Dialéctica,
en la Edad Media,
la Lógica mantiene la condición de ciencia propedéutica.
Así se estudia en la estructura de las enseñanzas del Trivium como una de las artes
liberales. En la Edad Moderna la lógica tradicional aristotélica
adquiere un nuevo enfoque en las interpretaciones racionalistas de Port Royal, en el siglo XVII, pero tampoco
supusieron un cambio radical en el concepto de la Lógica como ciencia.
Los filósofos racionalistas, sin
embargo, al situar el origen de la reflexión filosófica en la conciencia,
aportaron, a través del
desarrollo del análisis
como método científico del pensar, los temas que van a marcar el
desarrollo de la lógica formal. Son de especial importancia la idea de
Descartes de una Mathesis
universalis y de Leibniz que,
con su Characteristica
Universalis supone la
posibilidad de un lenguaje
universal, especificado
con precisión matemática sobre la base de que la sintaxis de las palabras debería estar en correspondencia con las entidades designadas como individuos o elementos metafísicos,
lo que haría posible un cálculo o computación mediante algoritmo en el descubrimiento de la verdad.
Ciencia formal
En el último tercio del siglo XIX la
Lógica va a encontrar su transformación más profunda de la mano de las
investigaciones matemáticas y lógicas, junto con el desarrollo de la
investigación de las estructuras profundas del lenguaje, la lingüística,
convirtiéndose definitivamente en una ciencia
formal.
Lógica informal
En el lenguaje cotidiano, expresiones
como «lógica» o «pensamiento lógico», aporta también un sentido alrededor de un
«pensamiento lateral» comparado, haciendo los contenidos de la afirmación coherentes con un contexto, bien sea del discurso o de una teoría de la ciencia,
o simplemente con las creencias o evidencias transmitidas por la tradición cultural.
Del mismo modo existe el concepto sociológico y cultural de lógica como, p.e. «la
lógica de las mujeres», «lógica deportiva», etc. Que, en general, podríamos
considerar como «lógica cotidiana» - también conocida como «lógica del sentido
común».
SISTEMAS LOGICOS
A.
Sistema formal
Existe un debate sobre si es correcto
hablar de una lógica, o de varias lógicas, pero en
el siglo XX se han desarrollado no uno, sino varios sistemas lógicos
diferentes, que capturan y formalizan distintas partes del lenguaje natural. Se
podría definir a un sistema lógico como un conjunto de cosas, que nos ayudan en
la toma de decisiones que sean lo más convenientemente posible.
Un sistema lógico está compuesto por:
1. Un
conjunto de símbolos primitivos (el alfabeto, o vocabulario).
2. Un
conjunto de reglas de formación (la gramática) que nos dice cómo construir fórmulas bien formadas a partir de los símbolos primitivos.
3. Un
conjunto de axiomas o esquemas de axiomas. Cada axioma
debe ser una fórmula bien formada.
4. Un
conjunto de reglas de inferencia. Estas reglas determinan
qué fórmulas pueden inferirse de qué fórmulas. Por ejemplo, una regla de
inferencia clásica es el modus ponens,
según el cual, dada una fórmula A, y otra fórmula A → B, la regla nos permite
afirmar que B.
Estos cuatro elementos completan la
parte sintáctica de los sistemas lógicos. Sin embargo,
todavía no se ha dado ningún significado a los símbolos discutidos, y de hecho,
un sistema lógico puede definirse sin tener que hacerlo. Tal tarea corresponde
al campo llamado semántica
formal, que se ocupa de introducir un quinto elemento:
5. Una interpretación
formal. En los lenguajes naturales, una misma palabra puede
significar diversas cosas dependiendo de la interpretación que se le dé. Por
ejemplo, en el idioma español, la palabra «banco» puede significar un edificio
o un asiento, mientras que en otros idiomas puede significar algo completamente
distinto o nada en absoluto. En consecuencia, dependiendo de la interpretación,
variará también el valor de verdad de la oración «el banco está cerca». Las
interpretaciones formales asignan significados inequívocos a los símbolos, y
valores de verdad a las fórmulas.
B.
Lógicas clásicas
Los sistemas lógicos clásicos son los
más estudiados y utilizados de todos, y se caracterizan por incorporar ciertos
principios tradicionales que otras lógicas rechazan. Algunos de estos
principios son: el principio del tercero excluido,
el principio de no contradicción, el principio de explosión y la monoticidad de la implicación.
Entre los sistemas lógicos clásicos se encuentran:
C.
Lógicas no clásicas
Los sistemas lógicos no clásicos son
aquellos que rechazan uno o varios de los principios de la lógica clásica.
Algunos de estos sistemas son:
v Lógica difusa:
Es una lógica plurivalente que rechaza el principio del tercero
excluido y propone un número infinito de valores de verdad.
v Lógica relevante: Es una lógica paraconsistente que evita el principio de explosión al exigir que para que un argumento
sea válido, las premisas y la conclusión deben compartir al menos una variable
proposicional.
v Lógica cuántica: Desarrollada para lidiar con
razonamientos en el campo de la mecánica cuántica; su característica más
notable es el rechazo de la propiedad distributiva.
v Lógica no monotónica: Una lógica no monotónica
es una lógica donde, al agregar una fórmula a una teoría cualquiera, es posible
que el conjunto de consecuencias de esa teoría se reduzca.
v Lógica intuicionista: Enfatiza las
pruebas, en vez de la verdad, a lo largo de las transformaciones de las
proposiciones.
D. Lógicas modales
Las lógicas modales están
diseñadas para tratar con expresiones que califican la verdad de los juicios. Así por
ejemplo, la expresión «siempre» califica a un juicio verdadero como verdadero
en cualquier momento, es decir, siempre.
No es lo mismo decir «está lloviendo» que decir «siempre está lloviendo».
v Lógica modal:
Trata con las nociones de necesidad, posibilidad,
imposibilidad y contingencia.
v Lógica deóntica: Se ocupa de las nociones morales de obligación y permisibilidad.
v Lógica
temporal: Abarca operadores temporales como «siempre», «nunca»,
«antes», «después», etc.
v Lógica epistémica: Es la lógica que formaliza
los razonamientos relacionados con el conocimiento.
v Lógica doxástica: Es la lógica que trata con
los razonamientos acerca de las creencias.
METOLOGICA
Mientras la lógica se encarga, entre otras cosas, de construir sistemas
lógicos, la metalógica se ocupa de estudiar las propiedades
de dichos sistemas. Las propiedades más importantes que se pueden demostrar de
los sistemas lógicos son:
A.
Consistencia
Un sistema tiene la propiedad de ser
consistente cuando no es posible deducir una contradicción dentro del sistema.
Es decir, dado un lenguaje formal con un conjunto de axiomas, y un aparato
deductivo (reglas de inferencia), no es posible llegar a una contradicción.
B.
Decidibilidad
Se dice de un sistema que es decidible cuando, para cualquier fórmula dada en
el lenguaje del sistema, existe un método
efectivo para
determinar si esa fórmula pertenece o no al conjunto de las verdades del
sistema. Cuando una fórmula no puede ser probada verdadera ni falsa, se dice
que la fórmula es independiente,
y que por lo tanto el sistema es no
decidible. La única manera de incorporar una fórmula independiente a las
verdades del sistema es postulándola como axioma. Dos
ejemplos muy importantes de fórmulas independientes son el axioma de elección en la teoría de conjuntos, y el quinto postulado de la geometría euclidiana.
C. Completitud
Se habla de completitud en varios
sentidos, pero quizás los dos más importantes sean los de completitud semántica
y completitud sintáctica. Un sistema S en un lenguaje L es semánticamente completo cuando
todas las verdades
lógicas de L son
teoremas de S. En cambio, un sistema S es sintácticamente completo si, para toda fórmula A del
lenguaje del sistema, A es un teorema de S o ¬A es un teorema de S. Esto es,
existe una prueba para cada fórmula o para su negación. La lógica proposicional y la lógica de predicados de primer orden son ambas semánticamente completas,
pero no sintácticamente completas. Por ejemplo, nótese que en la lógica
proposicional, la fórmula p no es un teorema, y tampoco lo es su
negación, pero como ninguna de las dos es una verdad lógica, no afectan a la
completitud semántica del sistema. El segundo teorema de incompletitud de
Gödel demuestra que
ningún sistema (definido recursivamente) con cierto poder expresivo puede ser a
la vez consistente y completo.
Una falacia es un argumento que si
bien puede ser convincente o persuasivo, no
es lógicamente
válido. Esto no quiere decir que la conclusión de los argumentos
falaces sea falsa,
sino que el argumento mismo es malo, no es válido.
Existen varias maneras de clasificar a
la gran cantidad de falacias conocidas, pero quizás la más neutral y general
(aunque tal vez un poco amplia), sea la que divide a las falacias en formales e informales.
Falacias formales.- son aquellas cuyo error reside en la forma o
estructura de los argumentos. Algunos ejemplos conocidos de falacias formales
son:
·
Afirmación del consecuente: Un ejemplo de
esta falacia podría ser:
1. Si
María estudia, entonces aprobará el examen.
2. María
aprobó el examen.
3. Por
lo tanto, María estudió.
Esta
falacia resulta evidente cuando advertimos que puede haber muchas otras razones
de por qué María aprobó el examen. Por ejemplo, pudo haber copiado, o quizá
tuvo suerte, o quizá aprobó gracias a lo que recordaba de lo que escuchó en
clase, etc. En tanto es una falacia formal, el error en este argumento reside
en la forma del mismo, y no en el ejemplo particular de María y su examen. La
forma del argumento es la siguiente:
4. Si p, entonces q.
5. Q
6. Por
lo tanto, p.
·
Generalización apresurada: En esta
falacia, se intenta concluir una proposición general a partir de un número
relativamente pequeño de casos particulares. Por ejemplo:
1. Todos
las personas altas que conozco son rápidas.
2. Por
lo tanto, todas las personas altas son rápidas.
El
límite entre una generalización apresurada y un razonamiento inductivo puede ser muy delgado, y encontrar un
criterio para distinguir entre uno y otro es parte del problema de la inducción.
Falacias informales.- son aquellas cuya falta está en
algo distinto a la forma o estructura de los argumentos. Esto resulta más claro
con algunos ejemplos:
·
Falacia ad
hominem: se llama falacia ad
hominem a todo argumento que,
en vez de atacar la posición y las afirmaciones del interlocutor, ataca al
interlocutor mismo. La estrategia consiste en descalificar la posición del
interlocutor, al descalificar a su defensor. Por ejemplo, si alguien argumenta:
«Usted dice que robar está mal, pero usted también lo hace», está cometiendo
una falacia ad hominem (en particular, una falacia tu quoque),
pues pretende refutar la proposición «robar está mal» mediante un ataque al
proponente. Si un ladrón dice que robar está mal, quizás sea muy hipócrita de
su parte, pero eso no afecta en nada a la verdad o la falsedad de la
proposición en sí.
·
Falacia ad
verecundiam: se llama falacia ad
verecundiam a aquel argumento
que apela a la autoridad o al prestigio de alguien o de algo a fin de defender
una conclusión, pero sin aportar razones que la justifiquen.
·
Falacia ad
ignorantiam: se llama falacia ad
ignorantiam al argumento que
defiende la verdad o falsedad de una proposición porque no se ha podido demostrar lo
contrario.
·
Falacia ad
baculum: Se llama falacia ad
baculum a todo argumento que
defiende una proposición basándose en la fuerza o en la amenaza.
·
Falacia
circular: se llama falacia circular a todo argumento que defiende
una conclusión que se verifica recíprocamente con la premisa, es decir que
justifica la vericidad de la premisa con la de la conclusión y viceversa,
cometiendo circularidad.
·
Falacia del hombre de paja: Sucede cuando,
para rebatir los argumentos de un interlocutor, se distorsiona su posición y
luego se refuta esa versión modificada. Así, lo que se refuta no es la posición
del interlocutor, sino una distinta que en general es más fácil de atacar.
Tómese por ejemplo el siguiente diálogo:
Persona
A: Sin duda estarás de acuerdo en que los Estados Unidos tienen el sistema
legal más justo y el gobierno más organizado.
Persona
B: Si los Estados Unidos son el mejor país del mundo, eso sólo significa que
las opciones son muy pocas y muy pobres.
En este diálogo, la persona B puso en
la boca de la persona A algo que ésta no dijo: que los Estados Unidos son el
mejor país del mundo. Luego atacó esa posición, como si fuera la de la persona
A.
Paradojas
Es un razonamiento en apariencia válido, que parte de premisas en apariencia verdaderas, pero que
conduce a una contradicción o a una situación contraria al sentido común. Los esfuerzos por resolver ciertas
paradojas han impulsado desarrollos en la lógica, la filosofía,
la matemática y las ciencias en general.
LOS PRINCIPIOS LÓGICOS.
Los “principios lógicos” constituyen las verdades
primeras, “evidentes” por sí mismas, a partir de las cuales se construye todo
el edificio formal del pensamiento, según la Lógica tradicional. Dentro de una
consideración los principios lógicos serán los preceptos o reglas “operantes”
que rigen toda forma correcta de pensamiento.
El modo de considerar estos principios ha variado a
través de la Historia de la Lógica y del pensamiento científico, pero la Lógica
Formal ha coincidido en la formulación de cuatro principios lógicos, aunque el
cuarto no es aceptado por todos los lógicos.
Tales principios son:
a. Principio de identidad.
b. Principio de Contradicción (o Principio de
no-Contradicción).
c. Principio de Exclusión del término medio (o
Principio del medio excluido o Principio del tercero excluido o Principio del
Tercer término excluido)
d. Principio de Razón Suficiente.
Desde un punto de vista psicológico (aunque no
desde la Psicología Científica sino de la Psicología Racional), serían las
leyes generales de “operación del pensamiento”, es decir, las leyes que
fundamentan los procesos lógicos.
Desde un punto de vista ontológico o metafísico,
estos principios serían las determinaciones más generales del “ser” aún más
generales que las categorías.
EL PRINCIPIO DE IDENTIDAD.
Fue formulado por primera vez como parte de una
teoría de la realidad del “ser”. Ese principio afirmaba algo tan general como
que “El ‘ser’ es”; esto puede ser explicado diciendo que “todo objeto es
idéntico a sí mismo”.
Estas afirmaciones no son todavía lógicas, pero con
el tiempo, se reflexiono sobre las implicaciones lógicas de ese principio,
logrando la formulación lógico-formal del primer principio. Esa
formulación consistió en la afirmación de la verdad de un juicio cuyo
objeto sea idéntico al predicado (ese tipo de juicio se ha llamado “juicio
analítico”). El primer principio lógico se ha resumido con la fórmula:
“A
es A”
EL PRINCIPIO DE CONTRADICCIÓN.
Este principio ha sido llamado tradicional e
incorrectamente “principio de contradicción”, cuando lo que se enuncia es la
imposibilidad de contradicción en el pensamiento.
Se trata del principio fundamental de la Lógica
clásica que descarta cualquier posibilidad de contradicción en el pensamiento y
en la realidad. La forma más plena del segundo principio es la que se refiere a
la no-contradicción entre dos juicios, tal como se expresa en la fórmula:
“’A
es A’ y ‘A no es A’ no son ambos verdaderos”
Y que se lee: El juicio ‘A es A’ y su
contradictorio, el juicio ‘A no es A’ no pueden ser verdaderos a la vez. La
forma original de este segundo principio es también ontológica y se formulaba
de la siguiente manera: “El ser es y no puede a la vez no ser”.
EL PRINCIPIO DE EXCLUSIÓN DEL TÉRMINO MEDIO.
Como un complemento necesario del principio de no
contradicción, se formula el principio de exclusión del término medio. En su
forma original, se refería también a una estructura de la realidad y consistía
en la afirmación de que no hay término medio entre el “ser” y el “no-ser”. En
su forma lógica, este principio debe entenderse como afirmando que dos juicios
contradictorios no pueden ser ambos falsos, tal como se sintetiza en al
fórmula:
“’A
es A’ y ‘A no es A’ no son ambos falsos” y que se lee: El juicio ‘A es A’
y su contradictorio, el juicio ‘A no es A’ no pueden ser falsos a la vez.
EL PRINCIPIO DE RAZÓN SUFICIENTE.
Este es, de los cuatro principios lógicos, el más
discutido, pues no todos los lógicos clásicos lo aceptan. Su formulación
fue muy posterior a la de los otros, pues mientras los primeros tres se
atribuyen a Parménides de Elea –quien vivió en el siglo V antes de nuestra
era-, el cuarto principio fue formulado por Gottfried Wilhelm Leibniz
aproximadamente en 1666, en plena Edad Moderna.
El cuarto principio se enuncia:
“Nada
es sin una razón suficiente”.
Y fue Christian Wolf en 1712 quien distinguió
entre tres modos de entender este principio:
a) Como “razón de ser”,
b) Como “razón de llegar a ser”
c) Como “razón de conocer”.
Dentro de la Lógica tradicional, se ha entendido
este cuarto principio en el tercero de los significados que propuso Wolf. Desde
ese punto de vista, el principio puede ser formulado:
“Todo
conocimiento tiene que estar fundado”.
CONCLUSIÓN
Lo importante es que nuestro propósito es obtener y
comunicar información y deseamos evitar los malentendidos el lenguaje mas útil
es el que tiene menos impacto emotivo. Si nuestro interés es
de carácter científico, haremos bien en evitar el lenguaje expresivo y en
cultivos un conjunto de términos que sean, desde el punto de vista emotivo lo
mas neutro posible.
Es en las ciencias físicas donde se ha hecho esto
con mayor con mayor amplitud, los términos más antiguos y con estímulos
emotivos, como "noble" y "bajo" para caracterizar metales,
han sido desplazados por una jerga especial o, a través del tiempo se ha
llegado a divorciarlos completamente de sus anteriores asociaciones honoríficas
o despectivas. Este ha sido en factor que ha contribuido al progreso
científico.
Con esta investigación
hemos obtenido un amplio conocimiento sobre la Lógica y el Lenguaje, aunque con
este material no es suficiente por lo amplio que este tema, pero nos dio una
iniciación en la cátedra en estudio, con esto queremos decir que hemos
entendido, en parte, la mayoría de los concepto y estudios referentes a los
temas antes mencionados; estos temas nos han parecido bastante amplios e
indispensables para nuestro crecimiento intelectual, ya que ellos nos sirven de
herramienta para cualquier actividad en nuestra existencia, en especial con
áreas de estudios y áreas de trabajo que se vinculan con lo estudiado, aunque
no es demás decir que la Lógica y El Lenguaje se aplican a cualquier tema, seas
social, científico, etc.
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